Encantador, encantador, encantador.

Mis días aquí fueron simplemente mágicos. Tenía mi propia villa con piscina, y ver el amanecer desde ahí fue como estar en una película. Desayunamos deliciosos platillos mientras flotábamos en la piscina, rodeados de la hermosa naturaleza. ¡Cada rincón de este lugar grita relajación y confort!

Lo recomiendo encarecidamente 🥰🌼

La atención del personal fue increíble! Siempre fue agradable ver a las 48 personas del staff tan amables, familiarizándose con nosotros. La comida era espectacular, especialmente los desayunos que disfrutamos con vistas a los campos de arroz. 🌾🍽️

No tengo nada negativo que decir.

La villa era impresionante, con una piscina privada que ofrecía total privacidad. Las comidas eran deliciosas, especialmente el almuerzo gourmet en el patio con vista a los campos de arroz. El personal era extremadamente amable y servicial.

Ojito con esta reseña…

Nuestra estadía fue mágica. Las villas privadas son espectaculares, con piscina y detalles encantadores. La comida fue un deleite, especialmente el desayuno en la piscina. El personal es increíblemente amable. Sin embargo, el lugar está algo alejado de Ubud, lo que puede complicar el transporte. En general, una experiencia inolvidable.

Un lugar mágico para desconectar

La verdad es que me encantó el ambiente de este lugar. Las villas eran súper acogedoras y tenían una vista increíble de las plantaciones de arroz. La comida también estuvo buenísima, especialmente el desayuno que comimos en nuestra villa. El único problemilla fue que el wifi no siempre funcionaba bien, pero al final eso no nos hizo menos feliz.

woow, la villa es un sueño! 😍 muy confortable y la piscina privada es brutal. el staff es super amable, siempre listos para ayudar con una sonrisa. el desayuno es delicioso, comimos en nuestra villa flotando en la piscina, super chill. el entorno es mágico, en medio de arrozales, perfecto para desconectar.

me estresó un poco el tema de los bichos en la villa 😬 y el wifi no siempre funcionaba bien, pero nada grave.

Las villas son impresionantes y ofrecen un ambiente mágico rodeado de naturaleza. El desayuno en el restaurante es delicioso y con vistas espectaculares. Sin embargo, la división en dos pisos de la villa fue incómoda, y la piscina podría tener más tumbonas para mayor comodidad.

La comida es siempre fresca y deliciosa. El ruido de motos puede ser molesto por la tarde.

Las villas privadas son espectaculares, equipadas con piscinas que brindan una sensación de exclusividad y comodidad. Las vistas desde el restaurante hacia las plantaciones de arroz son impresionantes y ofrecen un entorno perfecto para disfrutar de comidas deliciosas.

Las ranas y geckos en la villa pueden ser un inconveniente para algunos, aunque personalmente no me molestaron mucho. El ruido ocasional de los coches y motos cercanos puede distraer, especialmente si buscas un lugar totalmente tranquilo para descansar. Además, el hotel está un poco alejado, lo que puede complicar el transporte si no cuentas con una moto.